La Fundación Jesús Abandonado ha finalizado la primera fase de la reforma del pabellón 2 del Centro de Acogida, por lo que hoy entrarán a ocupar los nuevos dormitorios los primeros 16 usuarios a los que les han sido asignados.
Esta primera parte incluye 8 dormitorios dobles y uno de los aseos, en los que se han llevado a cabo mejoras sustanciales en las condiciones de habitabilidad e higiene y que cumplen además con la normativa que exige la Comunidad Autónoma para este tipo de alojamientos.
Una vez acabada la remodelación, el pabellón contará con 23 dormitorios dobles y triples, con una amplitud de al menos 18 m² cada uno, mayor luminosidad y mobiliario renovado, del que podrán disfrutar los 60 usuarios que se encuentran alojados en el centro de corta y media estancia.
La reforma se está llevando a cabo de forma gradual para no dejar de prestar el servicio a las personas que duermen allí actualmente, por lo que para acometer la ampliación de las habitaciones fue necesario trasladar a otras dependencias del Centro de Acogida un comedor, un office, la sala de consigna y el almacén.
El objetivo es dignificar la estancia, como se hizo en 2015 con el pabellón 1, así como prestar un mejor servicio a las personas acogidas, para lo que también se ampliarán los aseos, que pasarán a contar con 12 duchas, 21 inodoros y 21 lavabos.
El pabellón de corta y media estancia del Centro de Acogida está destinado al alojamiento e higiene de las personas que reciben asistencia por un período que va desde las dos semanas hasta los seis meses y que en algunos casos se puede ampliar a un año.
La reforma cuenta con un presupuesto total de 242.000 euros, «lo que supone un reto y un esfuerzo por nuestra parte porque emprendemos esta iniciativa con recursos propios, que además tenemos que hacer de forma progresiva, ya que seguimos atendiendo a las mismas personas durante la ejecución de las obras», señala el director de Jesús Abandonado, Daniel López.
La Fundación, que desarrolla su labor en la Región de Murcia junto a la Orden Hospitalaria San Juan de Dios, tiene como objetivo para 2018 dignificar el servicio integral que presta a las personas sin hogar. En 2017 ascendieron a 1.671 las personas que hicieron uso de los servicios de alojamiento en el Centro de Acogida.