En los últimos meses, hemos inaugurado la vivienda número 11 del proyecto ‘Housing First’. A diferencia de otros modelos tradicionales de inclusión, en los que el usuario debe pasar por distintas etapas para poder acceder finalmente a una vivienda, en el modelo Housing First, implantado en la Región desde el año 2017, el primer paso es el acceso a la vivienda.
En concreto, esta iniciativa nació para dar acogida y un hogar a las personas que, por distintas circunstancias, se encuentran en situaciones vulnerables, no habiendo sido de utilidad los mecanismos tradicionales de ayuda.
El objetivo a medio y largo plazo es que la persona que usa este recurso deje de necesitar el apoyo que se le brinda, más allá de la vivienda, y pueda realizar una vida plenamente autónoma y digna. Para ello, en primer lugar, se realiza una intervención en calle, a través de un equipo formado por una trabajadora social, una integradora social y voluntarios, quienes hacen rutas todos los días en las que conocen a las personas que están en situaciones de vulnerabilidad.
Detrás de cada usuario de este programa se esconde una historia y cada uno de ellos vive una adaptación diferente. Además, entre las principales características de este proyecto destaca que, a diferencia de otros programas de vivienda más supervisados y tutelados, el equipo de profesionales de Housing First respeta los tiempos de cada persona y sus decisiones.
En su conjunto, la Fundación cuenta con 11 inmuebles, en los que residen 10 hombres y una mujer. Los técnicos que forman parte de este proyecto realizan visitas periódicas a los usuarios para realizar un seguimiento del compromiso del mantenimiento de la vivienda y la correcta convivencia con los vecinos. Los profesionales también atienden las posibles necesidades de acompañamiento en el ámbito de la salud, relaciones con la administración y mantenimiento del hogar, tratando de inculcar habilidades de autonomía personal y social que deriven en un aumento de la autonomía del usuario.
El perfil medio de los usuarios de Housing First cuenta con una estancia previa en calle de tres años como mínimo. Aunque no existe un límite de edad, la mayoría de los beneficiarios son hombres de entre 40 y 60 años.
Acompañar a la persona en su adaptación a la vivienda, facilitando el uso de herramientas vinculadas a la vida doméstica, intentando diluir angustias y ansiedades que pueda generar la nueva situación, son los ejes que guían este programa.
Colaboradores
Este proyecto cuenta con la colaboración de la Consejería de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias y políticas sociales, el Ayuntamiento de Murcia y la Fundación Patronato Jesús Abandonado de Murcia.